jueves, 17 de junio de 2010

The end has no end...

Hay contradicciones que no me puedo remitir...ayer en mi largo viaje en bus hacia Penco city descubrí que todo lo tranquila que había estado este ultimo tiempo se estropeo por lo que mis emociones dictan por estos días, y me siento tonta y patética, poco racional, poco madura, un poco de todo lo que la inseguridad puede producir al no manejar respuestas de algo que no pertenece solo a mi, que depende de otra persona.
Las preocupaciones que aquejan a mi entorno y que por ende me aquejan a mi también hacen que todo se vuelva peor... el dolor que siento en mi pecho es la angustia de no poseer las soluciones en mis manos, de no poder otorgar tranquilidad a mis seres querido, en definitiva de no poder entregar real consuelo a los que necesitan de esto...no puedo dormir, no estoy tranquila, creo que seria bueno haber continuado con el tratamiento farmacológico, y nada de esto me importaría, estaría durmiendo tranquila, soñando con nada ni nadie, pensando en controlar mis pasos para no caer y tratando de no olvidarme de respirar...si ha esto le llaman vida, pues si que estoy viviendo, y aunque todo lo que pienso mientras escribo pueda parecer patético, prefiero estar así que no estar sintiendo nada, cuando estaba con pastillas me quejaba de sentir tan poco, ahora que siento mucho, pues debo sobrellevarlo...

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